Papá me violó

 

Una noche papá llegó borracho de la cantina y me violó.

De niña vivía en una casita muy bonita con mamá, papá y un perro pequeño. Mi vida siempre había sido feliz, mi padre trabajaba para una transnacional mientras mi madre era una buena ama de casa. Yo iba a la escuela y era la edad de tener novios de mano sudada como se dice en mi pueblo.

A papá le tenían en el pueblo por ser de carácter violento y estar protegido por su compadre el director de la policía así que podía hacer lo que quisiera sin ser detenido o molestado. Mis días se iban en ir a la escuela y jugar con pulgas un perro pequeño que nunca creció, en las tardes me gustaba regresar a casa con Matías un compañero de clase que devia ser mi novio y con quien experimente mi primer beso. Mi habitación estaba llena de princesas y unicornios. Todo era felicidad hasta que un día llegó un compadre de papá a saludar, un viejo conocido de su juventud alocada. Regresaba después de tener suerte fuera del país y volvía a casa.

Nos invitaron a comer a un restaurante muy elegante en donde papá se pasó de copas y mamá tuvo que regresar manejando la camioneta sin decir nada, esa noche papá duro vomitando pero nadie se atrevió a decir nada. Al día siguiente pidió una disculpa y pasaron los días hasta el siguiente mes que era cumpleaños del padrino Tito.

Mamá me vistió con mi mejor vestido y salimos temprano a la fiesta, papá estuvo todo el día tomando mientras ella platicaba con otras señoras sobre que los hombres nunca cambiarían. Yo encontré a Matías y pasamos un día muy bonito pero al final, cuando la noche era oscura papá fue a orinar a un árbol y me vió besándome con Matías y todo comenzó.

Me jalo del cabello se despidió del padrino Tito diciendo que iba a llevar a corregir a esta babosa, señalándome, el padrino Tito consintió y añadió "antes que te salga con domingo siete".

Mi padre levantó a mi madre de la mesa y le dijo nos cargamos, al llegar al auto el le negó las llaves a mamá y la abofeteo que el iba a manejar y que está puta (refiriéndose a mi) iba a aprender, se bajó de la camioneta abrió la puerta y me metió una cachetada. No había parado de llorar y me gritó que me callara o me iba a ir peor.

Al llegar a casa me dijo que me iba a dar la chingada de mi vida y me metió de las greñas mientras lloraba y gritaba en la calle, nadie vino a mi auxilio. Apenas pise dentro de casa una lluvia de golpes con cinto cubrió mi cuerpo infantil.

Mamá lloraba de miedo al no saber que sucedía y no poderse meter, el le dijo que la muy zorra de su hija estaba de puta con un niño que la estaba besando y Dios sabe que más había hecho.

Así que abrió la llave de agua del baño y me aventó adentro para bajarme lo caliente, con cinto en mano me obligó a desnudarme bajo el chorro de agua y frente a él, así lo hice quite mi blusa y pantalón, tenis y calceta quedando sólo en corpiño y panty. El agua marcaba mis pezones rosita y el vello que apenas brotaba de entre mis labios. "Todo dije" respondió y me golpeó con el cinto mojado, chille y obedecí. Estaba desnuda frente a él mientras me pegaba, me acerco y tocó mi cuerpo revisando que no tuviera marcas de Matías, abrió mi vagina y me pidió sentarme en la tasa en donde mamá abrió mi vagina y revisó que aún era virgen. Mamá recibió otro golpe y papá fue a dormir.

Días pasaron y veía como papá regresaba a su forma de ser, me compró regalos y ropa, hablo que era muy celoso al ser su única hija y que no quería que ese Matías mancillara mi nombre. No entendía nada solo acepte con la cabeza.

Todo transcurría bien hasta que empezaba a notar que papá comenzaba a verme raro porque crecieron mis senos igual que mis nalgas y mi vagina se estaba poblando más de vellos. Mi ropa interior comenzaba a desaparecer y luego aparecía en mi ropa sucia con una especie de moco sobre ella, años después descubrí que era esperma.

No pasó mucho tiempo para que papá saliera con el padrino Tito nuevamente y al pasar las 11 de la noche mamá le llamó y comenzó a gritar y que nos fuéramos a dormir, así lo hicimos. En la madrugada unos gritos me despertaron, papá estaba golpeando a mamá su puerta estaba abierta y cuando entré, mamá estaba desnuda llorando boca abajo en la cama mientras papá detrás de ella empujando con su cadera. No entendía que pasaba sólo veía a mamá con golpes y me asusté.

"Ya volviste putita verdad" me pregunto mientras mamá imploraba "Es muy chica déjala y usame a mi". La callo con un golpe en la cara y comenzo a brotar sangre de su boca. Me asusté y corrí gritando por la casa.

Papá me seguía pero no voltee hasta llegar a mi cuarto, pero olvidé poner seguro así que papá entró mientras estaba escondida bajo las sábanas, reaccione con un grito mientras gritaba que no me pegara. Papá me giró y colocó sobre sus piernas y un trozo de carne que salía se ellas. Sólo traía un camisón de pijama y mis calzones. Papá me colocó con las nalgas al aire y comenzó a golepear, luego me quitó los calzones diciendo que era una putita y comenzó a abrir mis nalgas sobando mi anito y con su dedo grueso la parte trasera de mi vagina ahora peluda. Estaba llorando porque pensé que me iba a pegar ahí cuando comenzó a masajear mi parte íntima.

Paralizada por el miedo deje que papá me desnudara y apreciada ni cuerpo adolescente frente a él, una buena vagina peluda y unas tetas pequeñas e inflamada que antes no estaban ahí.

Tomo una y la metió en su boca, succionando, gritaba de miedo mientras lo hacía, y entonces me abofeteo.

"Padrino Tito me dijo que sigues viendo a ese tal Matías, se ve que eres una niña muy putita. Así que si quieres verga yo te la voy a andar para saciar tu calentura"

Y sin decir más metió su falo erecto hasta lo más profundo de mi garganta lo que me hizo vomitar, me volvió a pegar y me llevó al baño donde nos colocamos bajo el agua "chupale pendeja y deja de chillar" comence a chuparle su verga gruesa y caliente mientras el me tocaba los senos, un extraño calor y excitación se escondían entre el miedo y la desesperación.

Papá me levantó, me abrió las piernas así de frente y comenzó a penetrar, el dolor era increíble parecía que iba a desfallecer ya que estaba metiendo su miembro en un espacio que no cedía y con mas fuerza me penetrada, comencé a sangrar, lance uno, dos, cinco gritos pidiendo ayuda pero nadie iba a venir, sólo quedaba sollozar mientras el mostró de mi padre me seguía penetrando vaginalmente.

"Eso era lo que querías de Matías verdad" sollozaba que no mientras el tapaba mi boca y continuaba con el entra saca, el dolor y ardor habían pasado y el calor aumentaba. A pesar que tenía miedo mi vagina se dilataba y mojaba mientras que el se excitaba más.

Me llevo a la cama y le habló a mamá para hacer a sus dos viejas suyas, esa noche permanecí llorando junto a mi madre mientras éramos violadas por mi padre. Recuerdo bien que termino dentro de mi pero no quede embarazada ya que ni la regla había tenido.

Varias noches el episodio se repetía pero ya ni lloraba ni oponía resistencia, papá se acostaba en la cama y solamente me bajaba los calzones para dejarme penetrar hasta que eyaculara dentro o fuera de mi. Cuando cumplí 15 conocí a un hombre de 30 y me escape con el a Tlaxcala. Ahora vivo con una hija, a mamá le escribo por Facebook mientras que a papá no lo quiero ver de por vida.

Decidí compartir esta historia ya que muchas chicas no tenemos sororidad y no te creen, y si cuentas tu historia como fue te censuran o tachan de loca. Espero las chicas que también hayan sufrido escriban aunque sea aquí para apoyarnos y los hombres vean que sus acciones lastiman e incluso violan a sus propias hijas.

Atentamente una bruja que no pudieron quemar.